Biografía
Nada más nacer, Sivila fue abandonada en un orfanato muggle en el sureste de
Inglaterra. Por suerte su estancia allí no duró mucho puesto que una mujer, viuda desde
hacía poco más de un año y de nombre Veronica, la adoptó y la crió hasta la edad de 11
años como a su propia hija. El secreto de que Sivila era adoptada permaneció en secreto
hasta que recibió la carta de Hogwarts, escuela de Magia y hechicería.
…Para sorpresa de la joven, su ‘madre’ ya sabía de todo aquello, algo que le dolió
mucho, pues se sintió traicionada. Un hombre anciano llegó a su casa ya que Sivila
había deseado no asistir a la escuela y no creerse la verdad de sus orígenes.
Aquello sucedió una tarde de agosto, antes de entrar en el mes de septiembre. Sivila ya
llevaba días encerrada en su cuarto, apenas sin comer. Aquel hombre intentó
convencerla de todas las maneras posibles de que la magia, podía ser buena y de que no
había razón por sentirse traicionada.
…Evidentemente aquello no significó nada para Sivila. Es más, lo único que provocó
fue que estallara en llanto y gritos, teniendo una crisis emocionar y desatando un poder
instintivo que reventó ventanas, lámparas y espejos.
Con cura y amor Veronica consiguió calmarla y al final, Sivila aceptó. Agradeció a su
madre adoptiva por acogerla y se disculpó con ella por haberse comportando tan
vergonzosamente durante todos esos años.
…Partió entonces hacia Hogwarts y pasó los 5 próximos años como una alumna normal
y corriente, pasando un tanto desapercibida, o por lo menos, lo necesario.
Sus orígenes han sido guardados en secreto por el director y el profesorado de la escuela
para su propia seguridad y sus compañeros la conocen por Sivila Russell y nada más.